No es racismo

Cada vez es más común ver en los medios como se usa el encabezamiento "ataque racista" a peleas de diverso índole. Se tiene que cambiar el termino con urgencia. El nivel de inmigración en España es tan elevado que las antiguas discusiones por el tráfico, las discusiones deportivas o las discusiones nocturnas por una mujer han pasado a ser ataques racistas.
Según los datos sobre la inmigración en España en el 2008 había 5.220.600 un 11,3% y en 2009 5.598.691 un 12%, el 44% se reparte en Madrid, Barcelona y Alicante, en la población alicantina de San Fulgencio, esta llega a ser el 69,55%.
La probabilidad de tener una discusión con un inmigrante es cada vez más alta, y esa discusión sería la misma que con un español. Cierto es que en cualquier discusión siempre se termina usando una cualidad característica de la persona contraria para insultarla, desde pequeñitos lo usamos, el gafotas, el gordo, el flacucho, el enano...
Los (des)gobernantes de este mundo nos venden incluso la visión de la alianza de las civilizaciones, pues que sepan que desde que íbamos a cuatro patas nos hemos estado repartiendo estopa por diferentes motivos y seguirá siendo así con los de aquí y los de haya.